La fabada asturiana es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía española, especialmente de la región de Asturias. Este guiso consiste en una deliciosa combinación de fabes (judías blancas) y diferentes tipos de embutidos, creando un plato sustancioso y lleno de sabor. En La Taberna Asturiana siempre tenemos Fabada Asturiana para ofrecerte el sabor más auténtico de nuestra región. A continuación, te proporcionaré una receta detallada para que puedas disfrutar de una auténtica fabada asturiana en la comodidad de tu hogar.

Ingredientes:

500 g de fabes (judías blancas)
200 g de tocino
2 chorizos asturianos
2 morcillas asturianas
150 g de lacón (puedes sustituirlo por jamón serrano)
1 cebolla grande, picada
4 dientes de ajo, picados
1 hoja de laurel
1 cucharadita de pimentón dulce
Aceite de oliva virgen extra
Sal al gusto

Instrucciones:

Remojo de les fabes:
- La noche anterior, pon les fabes en remojo en abundante agua fría. Asegúrate de que estén completamente cubiertas.
Preparación de los ingredientes:
- Al día siguiente, escurre les fabes y resérvalas.
- Corta el tocino en trozos medianos.
- Pela la cebolla y pícala finamente.
- Pela y pica los ajos.
- Corta el lacón en trozos.
Cocción de les fabes:
- En una olla grande, coloca les fabes escurridas y cúbrelas con agua fría.
- Lleva a ebullición y espuma las impurezas que se formen en la superficie.
- Reduce el fuego y añade la cebolla, el laurel, el lacón y el tocino. Cocina a fuego lento durante aproximadamente 1 hora y media o hasta que les fabes estén tiernas.
Preparación de la sofrito:
- En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva.
- Añade los ajos picados y sofríelos hasta que estén dorados.
- Agrega el pimentón y remueve rápidamente para evitar que se queme.
Incorporación del sofrito a las fabes:
- Vierte el sofrito en la olla con les fabes.
- Añade los chorizos y las morcillas enteras.
- Rectifica la sal según tu gusto.
- Cocina a fuego lento durante unos 30-40 minutos más, permitiendo que los sabores se mezclen y los embutidos se cocinen.
Servir:
- Una vez que les fabes estén tiernas y los embutidos bien cocidos, retira la olla del fuego.
- Deja reposar la fabada durante unos minutos antes de servirla.
- Sirve caliente en platos hondos, asegurándote de incluir fabes, embutidos y caldo.

La fabada asturiana tiene profundas raíces en la tradición culinaria de la región de Asturias, en el norte de España. Su historia se remonta a generaciones pasadas y refleja la influencia de la cultura asturiana, marcada por la agricultura, la ganadería y las duras condiciones climáticas.

Orígenes: La fabada asturiana tiene sus orígenes en la necesidad de crear platos nutritivos y sustanciosos que pudieran satisfacer el apetito de los trabajadores del campo y las montañas asturianas, conocidos como «vaqueiros de alzada». Estos eran pastores trashumantes que se trasladaban con sus rebaños en busca de pastos frescos. Necesitaban comidas que fueran fáciles de transportar y que proporcionaran la energía necesaria para afrontar largas jornadas de trabajo en condiciones climáticas adversas.

Ingredientes locales: La fabada asturiana destaca por el uso de ingredientes locales y productos típicos de la región. Las fabes, judías blancas autóctonas, son la base del plato. Estas judías tienen una textura cremosa y un sabor suave, lo que las hace ideales para este guiso. Los embutidos como el chorizo y la morcilla, así como el lacón o el jamón, se incorporaron al plato debido a la abundancia de ganado porcino en la región.

Desarrollo a lo largo del tiempo: A lo largo de los años, la fabada asturiana ha evolucionado y se ha convertido en un plato emblemático de la gastronomía española. A medida que la región prosperó y se desarrolló, la fabada dejó de ser simplemente un alimento de subsistencia y se convirtió en un plato festivo y de celebración, asociado con reuniones familiares y eventos especiales.

Festivales y eventos: La popularidad de la fabada asturiana se ha extendido más allá de Asturias, y hoy en día, hay festivales y eventos dedicados exclusivamente a este plato. Estos eventos a menudo incluyen concursos para determinar quién hace la mejor fabada, lo que demuestra la importancia cultural y culinaria de este plato en la región.

Simbolismo cultural: La fabada asturiana no es solo un plato delicioso; también tiene un profundo significado cultural. Representa la conexión de Asturias con la tierra, la tradición y el trabajo duro. Además, la fabada es un símbolo de la hospitalidad asturiana, ya que compartir una buena fabada con amigos y familiares es una forma común de expresar afecto y generar un ambiente acogedor.

En resumen, la fabada asturiana es mucho más que un simple guiso; es una expresión de la identidad y la historia de Asturias, transmitida a través de generaciones y celebrada en la mesa de muchas familias.